Baltar juega un juego del gato y el ratón con Adama y el Presidente, pensando que lo matarán una vez que le hayan sacado lo que quieren saber. Lee lidia con sus sentimientos por Kara, mientras lucha por mantener su matrimonio.

Con Hera ahora probablemente en manos de John Cavil, el Almirante Adama envía equipos de búsqueda para localizar La Colonia, el mundo natal de los Cylon, por así decirlo, que Ellen Tigh dice que es el único lugar donde imagina que podría estar. Adama llega a regañadientes a la conclusión de que la Galactica ha llegado al final de sus días. Ordena que se detengan todas las actividades de reparación y decide despojar la nave y compartir todo lo que se pueda salvar con el resto de la flota. Mientras tanto, Starbuck comparte con Gaius Baltar lo que encontró en la Tierra inhabitable. Él posteriormente - y de manera bastante pública - la proclama como un ángel.