En "Matrimonio con hijos" se parodiaba la familia norteamericana de los años 80: un marido al que poco le importaba su familia; la señora, una impulsiva compradora; la hija, que era el estereotipo de "rubia sexy y tonta"; y el hijo, un perdedor que busca ser atractivo. Posteriormente se unirían a la familia Seven, un hijo adoptado. Los Bundy viven en Chicago y, aunque no podría afirmarse que se aprecien particularmente, siempre se mantienen juntos. Tal y como el mismo Al Bundy explica: "Amor, odio... mira, somos una familia, ¿cuál es la diferencia?". Su convivencia, y la relación con sus vecinos, una pareja de recién casados idealistas y poco conscientes de la realidad del matrimonio, fue el punto de partida para una de las series más sarcásticas, desvergonzadas y cáusticas de la historia de la televisión norteamericana.

Desde que el FBI creó la lista de los criminales más buscados en 1950, por sus hojas han pasado más de 521 personas lo suficiente ingeniosas y preparadas para eludir la justicia. Capitaneados por el experimentado agente Jess LaCroix, un pequeño equipo altamente cualificado se desplazará por todo el país para localizarlos. Y es que los criminales más audaces necesitan de un grupo de élite para ser capturados. Los agentes se enfrentarán a todo tipo de casos, que involucran a grandes conocidos del crimen organizado, donde las mentiras y el círculo más cercano de cada fugitivo son clave para dar con ellos. LaCroix y su equipo elaborarán perfiles, buscarán en el entorno del fugitivo y mirarán dónde nadie más mira en una exhaustiva y tensa investigación en la que cada minuto cuenta.

Cordell Walker (Chuck Norris) es un agente de los Rangers de Texas (cuerpo de investigación) que ha sido criado por los indios. Es, además, un veterano de la guerra de Vietnam y un experto en artes marciales que desempeña el papel de shérif de la vieja escuela.