Utilizando la tecnología de comunicación de los Antiguos, Vala, que se encuentra en la galaxia Ori, se pone en contacto con el SGC. Les cuenta que después de ser absorbida por el agujero de gusano, despertó en una cama en un pueblo muy parecido al que ella y Daniel habían visitado cuando usaron las piedras de comunicación. Los lugareños creen que ella cayó del cielo, un regalo de los dioses, y entabla amistad con el amable Tomin, un devoto seguidor de los Ori que tiene una pierna lesionada. Vala tiene dos informaciones para el SGC: en primer lugar, está embarazada aunque insiste en que no ha tenido relaciones sexuales con nadie; y en segundo lugar, los Ori han estado construyendo una flota de naves y fortaleciendo su ejército. Mientras tanto, el Coronel Chekov aconseja al General Landry que los rusos no renovarán su acuerdo de trabajo con los Estados Unidos y se llevarán su Stargate.