Frank termina en el hospital después de confundir un generador eléctrico con un baño y le dicen que su estilo de vida está pasando factura. Lip vuelve de la universidad, pero Alex, su novia allí, lo ha seguido a casa, poniendo fin a su relación con Mandy. Karen se hace cargo del Jockey y Lillian abre un burdel.

Frank está consternado al descubrir que Lip ha estado viviendo cerca con su hija pequeña Katie pero no se ha molestado en visitarla, aunque ha estado en contacto con la abuela materna de Katie, Mimi. Los invita a tomar té, lo cual requiere la ayuda de Esther para limpiar la casa sucia, y conocen a Stella, la más joven de Monica, a quien ha estado cuidando. Mientras Lip se divierte con los otros chicos de la finca y Karen y Jamie lo reciben en el Jockey, Frank se enfurruña. Lo peor está por venir cuando Lip atrapa a su padre teniendo sexo con Derilee y Sherilee y, después de emborracharse, decide que él y Katie deben irse. Así, mientras todos los Maguire son invitados a la confirmación de Katie, Frank está ausente.