El ex-policía divorciado Jackson Brodie trabaja como detective privado en casos en su mayoría mundanos hasta que, por casualidad, conoce a las hermanas Amelia y Julia Land. Le piden que investigue la desaparición de su hermana menor Olivia, ocurrida hace 30 años, ahora que su juguete favorito ha aparecido entre las pertenencias de su difunto padre. Al mismo tiempo, el abogado nervioso Theo Wynne, impaciente por la falta de progreso de la policía, le pide que investigue el reciente asesinato de su hija adolescente Laura en su oficina. Con la ayuda a regañadientes de su ex colega Louise, Jackson descubre que el profesor de Laura, Jessup, intentó seducirla pero tenía coartada. Sin embargo, su novio Josh recuerda que tenía otro admirador celoso, aunque Theo se niega a creerlo de su pequeña. Luego, Jackson es abordado en un bar por Shirley, quien le pide ayuda para encontrar a su sobrina desaparecida, Tanya. Todas estas circunstancias le recuerdan el asesinato de su hermana años atrás, cuando era un niño.

Jackson finalmente resuelve el misterio del asesino de Laura, mientras Shirley, a punto de contraer matrimonio con un hombre adinerado, le confiesa que se siente culpable porque prometió cuidar a Tanya, la hija de su hermana Michelle, quien fue enviada a prisión por asesinar a su esposo. Tanya se descontroló al salir de un hogar de acogida y Shirley quiere enmendar las cosas. Sin embargo, una reunión con Michelle pinta una imagen diferente y Jackson está convencido de que Shirley solo quiere encontrar a Tanya para evitar arruinar el matrimonio. Afortunadamente, una feliz coincidencia trae consuelo para Tanya y Theo, mientras que la hermana mayor de los Land, ahora monja, arroja luz sobre el destino de Olivia. Sin embargo, Jackson está perturbado al enterarse de que su exesposa se va, junto con su hija, a un trabajo en Nueva Zelanda.

Después de ver el cadáver de una mujer en el río, que desaparece antes de que llegue la policía, Jackson interviene, junto con el escritor de crímenes Martin Canning, cuando Paul Bradley es víctima de un ataque aparentemente aleatorio de ira en la carretera. A petición del hospital, Martin acompaña a Paul a su casa después de su alta y se lleva una sorpresa cuando mira dentro de su bolso. Mientras tanto, Jackson descubre que la chica muerta era rusa y trabajaba para una empresa de limpieza bastante siniestra. El rastro lleva a una iglesia ortodoxa que también es utilizada por la dominatriz Tatiana, quien estaba dando placer al empresario turbio Graham Hatter cuando sufrió un ataque cardíaco masivo, y quien entabla una amistad improbable con la esposa de Graham, Gloria. Después de que se encuentra el cadáver de otra chica rusa, Jackson tiene motivos para creer que Martin está en peligro y corre a su casa, pero alguien ha estado allí antes que él.

El hombre muerto no es Martin, quien reaparece, habiendo sido drogado por el misterioso Bradley, quien luego desapareció. Jackson descubre que Graham Hatter dirigía la empresa de limpieza, que es una fachada para el tráfico sexual, y se acerca a Gloria, quien identifica a Smith, el hombre que atacó a Bradley y Jackson, como uno de los empleados más confiables de Graham. Gloria presenta a Jackson a Tatiana y las dos mujeres planean irse de la ciudad con las ganancias ilícitas de Graham. Sin embargo, Smith aparece y una vez más Martin demuestra ser un héroe mientras se revela la identidad de Bradley. Jackson, sin embargo, se prepara para despedirse de su hija Marlee mientras ella se va a Nueva Zelanda.

La cita de Louise con el doctor Patrick Carter se ve interrumpida cuando debe acudir a un accidente de tren, causado cuando una conductora anciana murió al volante y chocó su auto en la vía. Jackson intentó salvarla y a su vez es rescatado por Reggie, una joven niñera que conocía a la mujer fallecida y quiere que él encuentre a su empleadora Joanna Hunter, una doctora que desapareció con su hijo bebé. No está convencida por la historia del esposo de Joanna, Neil, de que están alojados con una tía. Utilizando la identidad de Andrew Jones, un hombre cuya billetera Reggie recogió por error en las vías del tren en lugar de la de Jackson, alquilan un auto y descubren que Neil estaba mintiendo sobre la supuesta visita de Joanna a su tía. Luego, Jackson es arrestado, ya que Andrew Jones es un hombre buscado.

Louise respalda a Jackson, quien es liberado, el verdadero Andrew Jones se suicida, aunque se establece un vínculo siniestro entre él y un incidente de la infancia de Joanna. A través del hermano de Reggie, Billy, Jackson descubre que Neil sabe más sobre la desaparición de su familia de lo que afirma y juntos Reggie y Jackson rastrean a Joanna y a su bebé. El día de trabajo de Jackson no ha terminado, gracias a un esposo obsesivo en un caso de divorcio.

Después de ser engañado para participar en un secuestro en Alemania, Jackson regresa a Edimburgo sintiéndose abatido, aunque adquiere un perro. Se le acerca Hope McMaster, una adoptada ansiosa por encontrar a su madre biológica, lo que lleva a Jackson a encontrarse con el ex policía Ray y su esposa Maggie, quienes conocían a los padres adoptivos. Poco después, un llamador anónimo le advierte que no investigue a Carol Braithwaite, a quien Jackson descubre que fue una prostituta asesinada en 1979. Visita a la oficial del caso, Tracy Waterhouse (interpretada por Victoria Wood), ahora una guardia de seguridad que ha acogido ilegalmente a Courtney, la hija silenciosa de otra prostituta, la última víctima de un asesino en serie. Después de que el corrupto ex jefe de policía Lomax amenaza a Jackson para que se aleje, Tracy y su ex colega Barry explican que después del asesinato de Carol, Lomax parece haber llevado a su hijo Michael lejos, y Jackson se encuentra con otro detective privado contratado por Michael para averiguar qué sucedió. Barry le cuenta a Jackson exactamente lo que sucedió cuando Carol fue asesinada, lo que lleva a Jackson a descubrir quién la mató. Para mitigar su culpa por el secuestro, Jackson entrega su honorario a Tracy para que comience una nueva vida con Courtney.

After Jackson's daughter Marlee returns to live with him, he is approached by Rachel Stewart, who is perturbed by her boyfriend Andy Marshall's frequent disappearances. Jackson follows Andy to a remote farm where he meets Miriam Baker. Miriam believes that the death of her estranged daughter, Isobel Marshall, a noted equestrian, was no accident and blames her then son-in-law -- Andy Marshall. Posing as a friend of Isobel, Jackson calls on Andy and is told by Rachel that he was having an affair with her whilst still married; and a colleague of Isobel reveals that Isobel was planning to take their son Freddie and leave Andy. Jackson discovers that Isobel was less than the golden girl suggested by her public image before working out how she died. His luck seems to be in when he wins a small fortune on a race-horse called Nobody's Darling but sadly the death of the bookmaker leads to the exposure of a scam and the winnings are frozen.

Jackson arrives at his office to find Deborah has quit and young Aiden Kelso is waiting for him. Aiden's mother Isla was understood to have been the victim of serial killer Philip McCrory but recently the dying McCrory had owned to all the murders bar Isla's and Aiden wants the case reopened. Aiden's father Ian is evasive, painting a saintly picture of Isla to protect Aiden, when she was actually loose living and a drinker. Having been fleeced by his girlfriend Charlotte, who he learns is a professional con artist, Jackson bumps into old flame Julia, now heavily pregnant and who inadvertently gives him a lead which results in the arrest of Isla's killer. Jackson also tracks down recalcitrant Egyptian teenager Samira Minyawi on behalf of her controlling father, as Minyawi helped in the German kidnapping. Having rescued Samira from her violent boyfriend, Jackson dates the recently divorced Louise Munroe but feels he cannot commit to a relationship with her and goes home, eventually ending up delivering Julia's baby.

Jackson arrives at his office to find Deborah has quit and young Aiden Kelso is waiting for him. Aiden's mother Isla was understood to have been the victim of serial killer Philip McCrory but recently the dying McCrory had owned to all the murders bar Isla's and Aiden wants the case reopened. Aiden's father Ian is evasive, painting a saintly picture of Isla to protect Aiden, when she was actually loose living and a drinker. Having been fleeced by his girlfriend Charlotte, who he learns is a professional con artist, Jackson bumps into old flame Julia, now heavily pregnant and who inadvertently gives him a lead which results in the arrest of Isla's killer. Jackson also tracks down recalcitrant Egyptian teenager Samira Minyawi on behalf of her controlling father, as Minyawi helped in the German kidnapping. Having rescued Samira from her violent boyfriend, Jackson dates the recently divorced Louise Munroe but feels he cannot commit to a relationship with her and goes home, eventually ending up delivering Julia's baby.

After Jackson's daughter Marlee returns to live with him, he is approached by Rachel Stewart, who is perturbed by her boyfriend Andy Marshall's frequent disappearances. Jackson follows Andy to a remote farm where he meets Miriam Baker. Miriam believes that the death of her estranged daughter, Isobel Marshall, a noted equestrian, was no accident and blames her then son-in-law -- Andy Marshall. Posing as a friend of Isobel, Jackson calls on Andy and is told by Rachel that he was having an affair with her whilst still married; and a colleague of Isobel reveals that Isobel was planning to take their son Freddie and leave Andy. Jackson discovers that Isobel was less than the golden girl suggested by her public image before working out how she died. His luck seems to be in when he wins a small fortune on a race-horse called Nobody's Darling but sadly the death of the bookmaker leads to the exposure of a scam and the winnings are frozen.

Louise respalda a Jackson, quien es liberado, el verdadero Andrew Jones se suicida, aunque se establece un vínculo siniestro entre él y un incidente de la infancia de Joanna. A través del hermano de Reggie, Billy, Jackson descubre que Neil sabe más sobre la desaparición de su familia de lo que afirma y juntos Reggie y Jackson rastrean a Joanna y a su bebé. El día de trabajo de Jackson no ha terminado, gracias a un esposo obsesivo en un caso de divorcio.

La cita de Louise con el doctor Patrick Carter se ve interrumpida cuando debe acudir a un accidente de tren, causado cuando una conductora anciana murió al volante y chocó su auto en la vía. Jackson intentó salvarla y a su vez es rescatado por Reggie, una joven niñera que conocía a la mujer fallecida y quiere que él encuentre a su empleadora Joanna Hunter, una doctora que desapareció con su hijo bebé. No está convencida por la historia del esposo de Joanna, Neil, de que están alojados con una tía. Utilizando la identidad de Andrew Jones, un hombre cuya billetera Reggie recogió por error en las vías del tren en lugar de la de Jackson, alquilan un auto y descubren que Neil estaba mintiendo sobre la supuesta visita de Joanna a su tía. Luego, Jackson es arrestado, ya que Andrew Jones es un hombre buscado.

Jackson finalmente resuelve el misterio del asesino de Laura, mientras Shirley, a punto de contraer matrimonio con un hombre adinerado, le confiesa que se siente culpable porque prometió cuidar a Tanya, la hija de su hermana Michelle, quien fue enviada a prisión por asesinar a su esposo. Tanya se descontroló al salir de un hogar de acogida y Shirley quiere enmendar las cosas. Sin embargo, una reunión con Michelle pinta una imagen diferente y Jackson está convencido de que Shirley solo quiere encontrar a Tanya para evitar arruinar el matrimonio. Afortunadamente, una feliz coincidencia trae consuelo para Tanya y Theo, mientras que la hermana mayor de los Land, ahora monja, arroja luz sobre el destino de Olivia. Sin embargo, Jackson está perturbado al enterarse de que su exesposa se va, junto con su hija, a un trabajo en Nueva Zelanda.

Después de ver el cadáver de una mujer en el río, que desaparece antes de que llegue la policía, Jackson interviene, junto con el escritor de crímenes Martin Canning, cuando Paul Bradley es víctima de un ataque aparentemente aleatorio de ira en la carretera. A petición del hospital, Martin acompaña a Paul a su casa después de su alta y se lleva una sorpresa cuando mira dentro de su bolso. Mientras tanto, Jackson descubre que la chica muerta era rusa y trabajaba para una empresa de limpieza bastante siniestra. El rastro lleva a una iglesia ortodoxa que también es utilizada por la dominatriz Tatiana, quien estaba dando placer al empresario turbio Graham Hatter cuando sufrió un ataque cardíaco masivo, y quien entabla una amistad improbable con la esposa de Graham, Gloria. Después de que se encuentra el cadáver de otra chica rusa, Jackson tiene motivos para creer que Martin está en peligro y corre a su casa, pero alguien ha estado allí antes que él.

El hombre muerto no es Martin, quien reaparece, habiendo sido drogado por el misterioso Bradley, quien luego desapareció. Jackson descubre que Graham Hatter dirigía la empresa de limpieza, que es una fachada para el tráfico sexual, y se acerca a Gloria, quien identifica a Smith, el hombre que atacó a Bradley y Jackson, como uno de los empleados más confiables de Graham. Gloria presenta a Jackson a Tatiana y las dos mujeres planean irse de la ciudad con las ganancias ilícitas de Graham. Sin embargo, Smith aparece y una vez más Martin demuestra ser un héroe mientras se revela la identidad de Bradley. Jackson, sin embargo, se prepara para despedirse de su hija Marlee mientras ella se va a Nueva Zelanda.

Después de ser engañado para participar en un secuestro en Alemania, Jackson regresa a Edimburgo sintiéndose abatido, aunque adquiere un perro. Se le acerca Hope McMaster, una adoptada ansiosa por encontrar a su madre biológica, lo que lleva a Jackson a encontrarse con el ex policía Ray y su esposa Maggie, quienes conocían a los padres adoptivos. Poco después, un llamador anónimo le advierte que no investigue a Carol Braithwaite, a quien Jackson descubre que fue una prostituta asesinada en 1979. Visita a la oficial del caso, Tracy Waterhouse (interpretada por Victoria Wood), ahora una guardia de seguridad que ha acogido ilegalmente a Courtney, la hija silenciosa de otra prostituta, la última víctima de un asesino en serie. Después de que el corrupto ex jefe de policía Lomax amenaza a Jackson para que se aleje, Tracy y su ex colega Barry explican que después del asesinato de Carol, Lomax parece haber llevado a su hijo Michael lejos, y Jackson se encuentra con otro detective privado contratado por Michael para averiguar qué sucedió. Barry le cuenta a Jackson exactamente lo que sucedió cuando Carol fue asesinada, lo que lleva a Jackson a descubrir quién la mató. Para mitigar su culpa por el secuestro, Jackson entrega su honorario a Tracy para que comience una nueva vida con Courtney.

El ex-policía divorciado Jackson Brodie trabaja como detective privado en casos en su mayoría mundanos hasta que, por casualidad, conoce a las hermanas Amelia y Julia Land. Le piden que investigue la desaparición de su hermana menor Olivia, ocurrida hace 30 años, ahora que su juguete favorito ha aparecido entre las pertenencias de su difunto padre. Al mismo tiempo, el abogado nervioso Theo Wynne, impaciente por la falta de progreso de la policía, le pide que investigue el reciente asesinato de su hija adolescente Laura en su oficina. Con la ayuda a regañadientes de su ex colega Louise, Jackson descubre que el profesor de Laura, Jessup, intentó seducirla pero tenía coartada. Sin embargo, su novio Josh recuerda que tenía otro admirador celoso, aunque Theo se niega a creerlo de su pequeña. Luego, Jackson es abordado en un bar por Shirley, quien le pide ayuda para encontrar a su sobrina desaparecida, Tanya. Todas estas circunstancias le recuerdan el asesinato de su hermana años atrás, cuando era un niño.