La ficción se centra en David Haller, un hombre que desde que era adolescente ha tenido que luchar contra una enfermadad mental. Su diagnóstico: esquizofrenia. Durante años, ha ido entrando y saliendo de diferentes hospitales psiquíatricos para tratarse, pero después de un extraño encuentro con un paciente, se tiene que enfrentar a la posibilidad de que las voces que escucha en su cabeza y las visiones que ve podrían ser reales.

Una devota joven descubre que, por error, ha sido inseminada artificialmente. Cuando Jane Villanueva era una niña, su abuela le dejó claras dos cosas: las telenovelas son la mejor forma de entretenimiento y perder la virginidad es lo peor que le puede ocurrir a una mujer. A sus 23 años y en pleno Miami, Jane es una chica responsable y piadosa, emocionada con crear un futuro junto a un novio perfecto con el que, por supuesto, no mantiene relaciones. Pero todos sus planes se van al traste cuando es inseminada accidentalmente por el despiste de una ginecóloga que pasa una mala racha. Paradojas del destino, el esperma pertenece a Rafael, un antiguo amor platónico de Jane, ahora casado con una retorcida mujer y dueño del hotel donde ella trabaja. Jane se ve obligada entonces a cambiar radicalmente de perspectiva: ahora su vida es la mejor telenovela y ella es la protagonista.

En Seattle, cerca del Hospital Grey Sloan Memorial de Anatomía de Grey, se encuentra el parque de bomberos donde trabajan día y noche los protagonistas de Estación 19, el spin-off de la mítica serie del canal. La protagonista de Estación 19 es Andy Herrera, una mujer bombero segura de sí misma, que también es la hija del Capitán Pruitt. Este último ejerce de mentor tanto para su hija como para Jack Gibson, el teniente de la Estación 19. Jack y Andy tienen personalidades opuestas, pero cada vez que están juntos no tardan en saltar chispas entre ambos.