Carter se marcha al Congo y se encuentra con un país destrozado por la guerra, para formar parte de un programa médico voluntario. Allí, se encuentra con unas primitivas instalaciones tercer mundistas, un puñado de heroicos voluntarios y unos pacientes en lamentable estado inundando el pequeño hospital mientras la sangrienta guerra civil amenaza con aniquilarlos a todos. Además, Carter se adentra en la selva para reunirse con Kovac, arriesgando su vida en un peligroso puesto de mando utilizado para una campaña de vacunación, donde se verán envueltos en primera línea de fuego, entre las tribus enfrentadas.

Carter regresa del Congo en busca del cuerpo de un médico y se reúne con varios colegas de su anterior viaje. Sin embargo, el caos, el hedor y los peligros de la larga guerra civil del país amenazan con bloquear sus esfuerzos y le colocan en situación de peligro inminente. Entretanto, todavía en este país destrozado por la contienda, vemos a Kovac a través de flashbacks luchando por debilitar la malaria y atendiendo las necesidades de los enfermos y moribundos.

En nochebuena, los empleados de la fría sala de urgencias hacen todo lo posible para celebrar la festividad, Carter hace lo mismo al otro lado del mundo en una decadente clínica congoleña. Se desvela a través de flashbacks su relación con Makemba "Kem" Likasu, una guapa africana que trabaja con enfermos de SIDA. Poco a poco, sus enfrentamientos sobre la escasez de recursos han dado paso a un profundo romance. Carter va adaptándose al calor, l a mugre y los peligros de la zona. Mantiene en todo momento el contacto con sus amigos de Chicago y emprende una misión personal para ayudar a una madre embarazada que se está muriendo de SIDA. A pesar de los sentimientos antiamericanos de sus compañeros franceses, Carter sigue decidido a llevar la alegría y el amor de la Navidad a los niños de Kisangani.