Lu Johnson es un actor.
Lu Johnson aparece en: Larry David (2000), El séquito (2004) y Las Chicas Gilmore (2000), entre otros.
Lu Johnson
persona
Conocido por
- ya la vi
- 33min
- Temporadas: 12
- Episodios: 120
- ya la vi
- 27min
- Temporadas: 8
- Episodios: 96
- ya la vi
- 43min
- Temporadas: 7
- Episodios: 153
- ya la vi
- 45min
- Temporadas: 5
- Episodios: 77
- ya la vi
- 45min
- Temporadas: 15
- Episodios: 335
Hay personas que parecen haber sido maldecidas con la ley de Murphy: si algo tiene la posibilidad de salir mal, saldrá mal. Larry David se considera una de ellas. El creador y productor de Seinfield, una de los programas más laureados de la historia de la televisión, se interpreta a sí mismo en esta rompedora serie donde, en un ambiguo punto entre la realidad y la ficción, seguimos su día a día que se desarrolla entre celebridades y gente de la calle que nunca sabemos si están o no interpretando un guión. Somos así testigos de su peculiar y ácida visión de todo lo que le rodea y de su don para convertir situaciones cotidianas como ir al cine o atender una llamada telefónica en verdaderos despropósitos. Larry David, ganadora de un Globo de Oro a la mejor comedia y nominada a veinte premios Emmy, parte de un planteamiento completamente subversivo que la convierte en la serie más divertida y corrosiva de los últimos años. Diferente a cualquier otra cosa que se pueda ver hoy día en televisión.
Vince Chase es un joven actor atractivo y sexy cuya carrera está en pleno auge. Para compartir la diversión de su nueva posición social y, a la vez, mantener los pies en el suelo, Vince no pierde contacto con Eric, Drama y Turtle, sus amigos de la infancia de Queens, en Nueva York, de donde procede. Juntos, navegarán por lo mejor y lo peor de la vida en Hollywood, donde el juego y las apuestas son grandes, y el dinero y las tentaciones son aún mucho más grandes que antes.
Bienvenido a Stars Hollow, Connecticut, una ciudad encantadora, pequeña y un poco fuera del centro conocida por sus jardines verdes, casas de madera y suficientes personajes extravagantes para llenar cada paseo en carruaje, desfile y picnic en millas. Es aquí donde conocemos a la testaruda Lorelai Gilmore, de 32 años, quien se labra una vida cómoda, cálida y llena de cafeína para ella y su igualmente obstinada hija adolescente, Rory. Pero cuando la atención de Rory pasa de los sueños de la escuela privada y Harvard a los pensamientos de los niños y la autosuficiencia de los adolescentes, la madre soltera Lorelai comienza a notar más de su propia juventud rebelde, hace solo 16 años, en Rory.
Hacen de la estafa un arte. Malentendidos, engaños, sorpresas... en el universo de un ladrón nada es lo que parece.
Nate Ford lidera a un grupo de timadores acostumbrados a trabajar por su cuenta pero que se unen para hacer ‘el bien' y robar a los ricos para ayudar a los débiles. Todo ello gracias a la alta tecnología y lo mejor de cada casa: El hacker Alec Hardison, la prometedora carterista Sophie Deveraux, el especialista en recuperaciones Eliot Spencer y la escurridiza Parker.
Un delincuente siempre deja huellas. Es lo que muestra la serie C.S.I. (Crime Scene Investigation). Producida por Jerry Bruckheimer, el director de las películas Armageddon y The Rock, y coproducida por James C. Hart, dos veces nominado al premio Emmy por las series Chicago Hope y Wonder Years.
C.S.I. retrata el difícil día a día de un grupo de investigadores judiciales de la ciudad de Las Vegas, en la que resuelve casos en que la policía falló y analiza los lugares donde se hicieron crímenes.
Una hebra de cabello, un pedazo de uña, huellas dactilares. Todas estas pistas improbables son herramientas para llegar al delincuente. Un aparente suicidio puede revelarse un asesinato cruel, sólo a través del análisis del tamaño del agujero de la bala en el cuerpo.
Entrenados en los tradicionales métodos de investigación, los especialistas de la serie buscan todas las evidencias en el lugar del crimen. La experiencia y el instinto también son armas poderosas en el combate a la violencia.
Sus conclusiones siempre son sorprendentes. La razón del crimen y la identidad del culpable no siempre son fáciles de descubrir.