Wetzel se distrajo durante un ejercicio de guerra, y estrella un tanque debido a la frustración que siente por no haber conseguido retirarle la custodia de su hijo a su esposa. Por lo tanto es acusado de incumplimiento de deberes, pero ruega a Mac y Harm que lo mantengan fuera de la cárcel, ya que su detención puede significar la pérdida de su hijo.

Tras conseguir una evidencia que parece probar que el padre de Harm se encuentra aún con vida en Siberia Harm convence al Almirante para que le de unos días libres y poder ir a Rusia con Mac de acompañante para que le haga de intérprete. Cuando llegan a Moscú son entrevistado por Mark Falcon, el agente de la KGB que había robado para Harm una lista de prisioneros de guerra y recibirán información adicional de manos del Coronel Parlovsky que fue el primero en entregarle a Harm la primera evidencia de que su padre se encontraba aún con vida en 1980. Con los Rusos bloqueando cualquier acceso a Siberia a través de tierra o de aire, con la ayuda de Alexi, un operario del mercado negro, consiguen robar un caza para lograr llegar a Siberia. Nada más aterrizar Falcon y Parlovsky abandonan a su suerte a Mac y Harm mientras que oficiales del ejército del aire ruso les esperan para matarles paro Mac y Harm logran hacer despegar al avión antes de que les alcancen los misiles.