En una hora de almuerzo en la concurrida Plaza Archer en Dallas, Texas, un francotirador, disparando doce tiros, logra matar a seis personas. La Unidad de Análisis de Conducta (BAU) tiene que determinar si se trata de un ataque aleatorio, un ataque dirigido, un ataque terrorista -local o extranjero- o incluso algo relacionado con el próximo quincuagésimo aniversario del asesinato a tiros de John F. Kennedy. Las seis víctimas no relacionadas fueron asesinadas en diferentes partes de la plaza, las seis balas restantes se dispersaron en otras partes de la plaza, lo que lleva al equipo a creer inicialmente que se trataba de un ataque aleatorio por parte de alguien que era un mal tirador. Pero la naturaleza de las seis personas asesinadas los lleva a creer finalmente que el francotirador era de hecho un excelente tirador, y que las seis balas no mortales eran pistas falsas. Deben examinar los antecedentes de los seis muertos para ver quién era el objetivo o los objetivos previstos. Reid logra reducir la lista de posibles objetivos a tres, y probablemente no más de dos, considerando a las víctimas restantes como daño colateral. Cuando ocurre un segundo tiroteo de francotirador en una gasolinera que deja tres muertos más, la teoría de que se trató de un ataque dirigido se fortalece en base a la ubicación del tirador en relación con la propia estación. Deben encontrar una conexión entre quienes eran el o los objetivos en el primer tiroteo y quienes eran el o los objetivos en el segundo tiroteo, al menos para descubrir la motivación del autor desconocido. Incluso si logran encontrar la conexión, descubrir la identidad del francotirador real puede ser un poco más difícil.