Dexter se presenta en la 20a reunión de su escuela secundaria con la intención de hacer frente a la ex rey de baile. Por otra parte, una investigación sobre un asesinato atroz, con connotaciones religiosas conduce a Dexter a reflexionar sobre asuntos espirituales y se preguntan sobre el legado de su hijo. Se produce una situación inesperada en la que Debra se convertirse en una heroina.

El Hermano de Sam, un ministro con antecedentes criminales, se presenta en el departamento de homicidios para ayudar a resolver un asesinato macabro, pero Dexter lo ve como lo que realmente es y, definitivamente, no es un hombre de Dios. Por otra parte, la heroicidad de Debra desata un par de propuestas sorprendentes.

Dexter se enfrenta a una visión sobria de su propio futuro cuando un asesino en serie de su pasado hace una reaparición sorprendente. Debra no se siente cómoda en su nuevo trabajo. Travis lucha por hacer feliz a su mentor, mientras él y Gellar preparan un nuevo cuadro.

Sorpresa tras sorpresa para Dexter... una situación de emergencia con Harrison, un nuevo cuadro de Gellar y Travis, el Hermano Sam apoyandole y un "inesperado" mensajero alado. Dextar se cuestiona la idea de la fe. Debra da su primera conferencia de prensa oficial.

Con la ayuda de su nuevo amigo el "hermano Sam", Dexter se pregunta si hay luz dentro de él para hacer frente a la oscuridad, mientras que la búsqueda de los asesinos Doomsday lo lleva en una nueva dirección; Batista y Quinn hacen una visita a la universidad donde ensaña el profesor Gellar; debido a normativa del departamento después de los disparos, Debra se ve obligado a hacer terapia.

Dexter se encuentra atrapado en un caso muy personal que despierta las necesidades de su Oscuro Pasajero. Debra se siente abrumada por sus nuevos deberes como teniente, lo que se hace aún más complicado cuando se entera de que Quinn se acostó con una testigo en el caso del Juicio Final.

Dexter inicia un viaje a Nebraska para atar algunos cabos sueltos del pasado. Debra trata de lidiar con las complicaciones de su promoción mientras dirige la investigación del Juicio Final.

Dexter usa lo aprendido con el Hermano Sam para seguir algunas nuevas pistas en la investigación del Juicio Final. Debra discute con la capitán LaGuerta por el caso de una chica de compañía asesinada.

Dexter recibe una ayuda inesperada, mientras que continua la caza de los asesinos Doomsday y trata de mantenerse un paso por delante de Homicidios. Debra descubre algo nuevo sobre sí misma en la terapia.

Dexter trata de averiguar quien será la siguiente victima de los asesinos de Doomsday antes de que sea demasiado tarde. Debra tiene una fuerte reacción en la escena del crimen, lo que le lleva a la conclusión de que ella se apoya demasiado en su hermano.

Dexter llega a la conclusión de que para atrapar a los asesinos Doomsday, debe crear su propio cuadro macabro. La batalla de Debra con LaGuerta en el caso de las chicas de compañía se recrudece, y su terapeuta le hace una propuesta desconcertante.

Dexter y Homicidios corren contra reloj para atrapar a los asesinos Doomsday antes del eclipse luner y su horrendo acto final. Debra lucha con una nueva realidad emocional.

Debra, tras descubrir a Dexter asesinando a Travis Marshall, decide ayudarle a encubrir dicho crimen creyendo que se trata de uno en defensa propia. Pero, poco a poco, empiezan a aflorar en ella recuerdos que le hacen dudar sobre su hermano. Por otra parte, LaGuerta encuentra una prueba que le lleva a reabrir la investigación sobre el Carnicero de la bahía y un mafioso ucraniano asesina al detective Mike Anderson. Cuando Dexter descubre quién ha sido, decide ir tras él.

Un reo decide, años después, aclarar donde enterró a sus víctimas. Dexter es uno de los que forman parte de la patrulla y conversa unos minutos con él acerca de la vida de un asesino una vez es descubierto. Debra intenta que su hermano deje de cometer asesinatos y decidirá ser su sombra, con el consentimiento de él.

Dexter intenta llevarse con él a Debra con su nuevo objetivo. Mientras la mafia rusa busca venganza por el asesinato de uno de lo suyos, Quinn sigue acercándose a la bailarina del club de striptease. LaGuerta está convencida de que el carnicero de Bay Harbor aún está fuera, por ello, intenta reclutar de nuevo a Batista para que ayude a Debra en el caso.

Tras capturar a un asesino, las cosas parecen torcerse para Debra. En un esfuerzo por ayudar a su hermana, Dexter entra en un juego que puede poner en peligro su vida.

Debra se hace amiga de Sal Price, un escritor local especializado en crímenes que afirma tener informaciones incriminatorias sobre Hannah McKay. Quinn recibe una extraña oferta y está acostumbrado a aceptarla. Mientras Batista contempla una nueva oportunidad de trabajo atractiva con la compra de un restaurante y LaGuerta espera sacar a relucir nuevas pruebas en el caso del carnicero de la bahía.

Quinn quiere proteger a Nadia pero para lograrlo recae en antiguas malas costumbres. La atmósfera se recalienta entre Dexter y Hannah, pero cuando Sal Price descubre que están juntos, quiere la historia en exclusiva.

Fuera de prisión, Isaak (mafioso ucraniano con sed de venganza y pinta de villano de cómic demente) vuelve a perseguir a Dexter, mientras que Quinn continúa su lucha contra Koshkas. Dexter intenta esconder su relación con Hannah a Debra, pero una visita sorpresa de sus hijos, Astor, Cody y Harrison, perturba sus planes. Deb ha perdido a otro potencial novio a manos de la Parca. Y ella sabe que Hannah McKay (Strahovsky Yvonne) es responsable de su asesinato. Desde que el asesino en serie se enamoró de Hannah (le comprendemos), Dexter tiene que tener cuidado con Debra porque sabe que si las junta solo una saldrá viva de la pelea de gatas que se organizará. No sabemos quién va a ganar, pero la tensión ya es palpable.

La investigación de Laguerta progresa gracias a su nuevo aliado, el capitán Matthews (Geoff Pierson). En su cabeza, las piezas comienzan a reunirse y le faltan muy poco para desenmascarar a Dexter. Veremos más sobre el pasado de Hannah con ocasión de la llegada de su padre Clint McKay (Jim Beaver). Quinn (Desmond Harrington) va a defender el honor de Nadia (Katia Winter) y va a meterse en una situación muy inestable.

Debra aprecia mucho a su hermano, incluso un poco demasiado si se considera que estaba enamorada de su hermano adoptivo. Bien evidentemente, ella intenta como puede superar esta decepción sentimental, pero el hecho de ver a Dexter emparejado con Hannah mientras que sabe que ella es una asesina en serie… es superior a sus fuerzas. Por eso cuando Hannah aparece en su casa para hacerle una proposición de paz, su respuesta no es positiva. Quiere a Dexter de todo corazón y está segura de que esa mujer no le conviene. Debra es víctima de un accidente de coche y acaba en el hospital. En su vehículo es encontrada una botella cuya agua podría haber sido envenenada, lo que lanza a Dexter sobre la pista de Hannah (Yvonne Strahovski). ¿Pero está tan enfadada la rubia como para intentar matar a la hermana de su amorcito? A menos que no se trate sencillamente de unas medicinas mal tomadas. Dexter también debe enfrentarse a las acusaciones de María LaGuerta (Lauren Velez) y Matthews (Geoff Pierson), este va exponerle los hechos de frente, para sorpresa de Dexter. Para completarlo todo, debe ocuparse de Hector Estrada, el hombre que habia matado a su madre ante sus ojos cuando Dexter era un niño.

Dexter se decidió a dejar a Hannh fuera de juego. Laguerta va a por el protagonista en el mismo seno de la Miami Metro. Su padre se inquietaría si deja de seguir su código, pero tal vez sea el único medio para no acabar en la silla eléctrica… hablamos de eliminar a Laguerta de verdad. A menos que Debra, totalmente sumergida en la defensa de su hermano, se encargue de ella. Para coronarlo todo, Doakes regresa…

Han pasado seis meses desde el asesinato de LaGuerta. Dexter sigue gestionando su vida como padre, hermano y asesino en serie. Debra ha dejado la policía de Miami y ahora trabaja como detective privado para una empresa. Batista la ha sustituido como Teniente. Mientras tanto, la policía metropolitana de Miami investiga el asesinato de un hombre al que le han extraído partes de su cerebro.

La Dra. Vogel le revela a Dexter que ella ayudó a Harry a crear su Código y que alberga un interés perverso y admiración por los psicópatas. Ella pide ayuda a Dexter para encontrar al neurocirujano ya que ella cree que es uno de sus antiguos pacientes y que supone un grave peligro para su vida. Debra tiene un enfrentamiento violento con el asesino a sueldo; Quinn y Jamie discuten sobre el futuro de Quinn y la participación de Batista en su relación.

El primer sospechoso de la Dra. Vogel, Lyle Sussman, es encontrado muerto en lo que parece un suicidio, con lo que la policía cierra el caso del neurocirujano. Sin embargo, éste continúa dejando trofeos en la puerta de Vogel. Dexter persigue a otro de los antiguos pacientes de Vogel, Ron Galuzzo; Debra pierde el control y trata de confesar haber matado a Laguerta; Batista comienza a perder la fe en la capacidad de Quinn para superar el examen de sargento.

Dexter busca al siguiente asesino en potencia de la lista de Vogel, AJ Yates. Se encuentra evidencia de que Yates es el cirujano de cerebro y trata de matarlo, pero Yates escapa. Quinn pasa el examen de sargento, y Batista lo presiona para resolver el caso Rivera si quiere asccender. Masuka tiene un encuentro incómodo con una visita sorpresa. Vogel inicia el tratamiento de Debra llevándola al contenedor donde mató a Laguerta.

Vogel trata de arreglar las cosas entre Dexter y Debra con una sesión de terapia, pero Dexter se marcha enfadado. La policía intensifica su investigación sobre el asesino de Norma Rivera, se dirigen a su jefe Ed Hamilton, con quien estaba teniendo una aventura, pero Matthews le pide a Quinn que vaya con cautela con Hamilton porque es un amigo del departamento. Dexter sospecha que el hijo de Hamilton, Zach, es el verdadero asesino.

Dexter investiga a Zach y confirma que él asesinó a Norma. Vogel quiere probar y enseñar el Código de Harry a Zach, pero Dexter no quiere saber nada de él. Debra ayuda a su jefe, Elway, para demostrar el adulterio del novio de su hermana.

Tras despertar ileso, Dexter se da cuenta de Hannah les ha enviado un mensaje. Dexter encuentra el alias y la dirección actual de Hannah, y se entera de que está casada con el multimillonario Miles Castner. Masuka descubre que Nikki trabaja en un bar de topless e intenta conseguirle trabajo en su laboratorio. Zach visita la comisaría con su abogado y le exige que Quinn deje de investigarlo. Quinn y Jamie deciden irse a vivir juntos.

Dexter encuentra pruebas de que Zach mató Cassie. Él sigue Zach a un hotel en Key West, y Hannah le acompaña. Durante el viaje, Dexter tiene previsto llevar Hannah una nueva identidad para que pueda huir del país. Debra utiliza un GPS de Elway para seguir a Dexter.

Dexter investiga un asesinato que golpea de cerca . Mientras tanto, Vogel recibe la sorpresa de su vida cuando alguien de su pasado regresa.

Dexter solicita la ayuda el Vogel para atraer al neurocirujano a un lugar con el fin de ponerlo sobre su mesa. Más tarde, una persona importante en la vida de Dexter es asesinada ante sus ojos.

Dexter está dividido entre huir del país con Hannah y Harrison, y sacar a Saxon de una vez por todas.

Con un huracán amenazando a Miami, Dexter se decide a terminar con las cosas a su manera.

Han pasado seis meses desde el asesinato de LaGuerta. Dexter sigue gestionando su vida como padre, hermano y asesino en serie. Debra ha dejado la policía de Miami y ahora trabaja como detective privado para una empresa. Batista la ha sustituido como Teniente. Mientras tanto, la policía metropolitana de Miami investiga el asesinato de un hombre al que le han extraído partes de su cerebro.

Vogel trata de arreglar las cosas entre Dexter y Debra con una sesión de terapia, pero Dexter se marcha enfadado. La policía intensifica su investigación sobre el asesino de Norma Rivera, se dirigen a su jefe Ed Hamilton, con quien estaba teniendo una aventura, pero Matthews le pide a Quinn que vaya con cautela con Hamilton porque es un amigo del departamento. Dexter sospecha que el hijo de Hamilton, Zach, es el verdadero asesino.

Debra aprecia mucho a su hermano, incluso un poco demasiado si se considera que estaba enamorada de su hermano adoptivo. Bien evidentemente, ella intenta como puede superar esta decepción sentimental, pero el hecho de ver a Dexter emparejado con Hannah mientras que sabe que ella es una asesina en serie… es superior a sus fuerzas. Por eso cuando Hannah aparece en su casa para hacerle una proposición de paz, su respuesta no es positiva. Quiere a Dexter de todo corazón y está segura de que esa mujer no le conviene. Debra es víctima de un accidente de coche y acaba en el hospital. En su vehículo es encontrada una botella cuya agua podría haber sido envenenada, lo que lanza a Dexter sobre la pista de Hannah (Yvonne Strahovski). ¿Pero está tan enfadada la rubia como para intentar matar a la hermana de su amorcito? A menos que no se trate sencillamente de unas medicinas mal tomadas. Dexter también debe enfrentarse a las acusaciones de María LaGuerta (Lauren Velez) y Matthews (Geoff Pierson), este va exponerle los hechos de frente, para sorpresa de Dexter. Para completarlo todo, debe ocuparse de Hector Estrada, el hombre que habia matado a su madre ante sus ojos cuando Dexter era un niño.

Dexter se presenta en la 20a reunión de su escuela secundaria con la intención de hacer frente a la ex rey de baile. Por otra parte, una investigación sobre un asesinato atroz, con connotaciones religiosas conduce a Dexter a reflexionar sobre asuntos espirituales y se preguntan sobre el legado de su hijo. Se produce una situación inesperada en la que Debra se convertirse en una heroina.

Fuera de prisión, Isaak (mafioso ucraniano con sed de venganza y pinta de villano de cómic demente) vuelve a perseguir a Dexter, mientras que Quinn continúa su lucha contra Koshkas. Dexter intenta esconder su relación con Hannah a Debra, pero una visita sorpresa de sus hijos, Astor, Cody y Harrison, perturba sus planes. Deb ha perdido a otro potencial novio a manos de la Parca. Y ella sabe que Hannah McKay (Strahovsky Yvonne) es responsable de su asesinato. Desde que el asesino en serie se enamoró de Hannah (le comprendemos), Dexter tiene que tener cuidado con Debra porque sabe que si las junta solo una saldrá viva de la pelea de gatas que se organizará. No sabemos quién va a ganar, pero la tensión ya es palpable.

Dexter está dividido entre huir del país con Hannah y Harrison, y sacar a Saxon de una vez por todas.

Dexter solicita la ayuda el Vogel para atraer al neurocirujano a un lugar con el fin de ponerlo sobre su mesa. Más tarde, una persona importante en la vida de Dexter es asesinada ante sus ojos.

Dexter investiga un asesinato que golpea de cerca . Mientras tanto, Vogel recibe la sorpresa de su vida cuando alguien de su pasado regresa.

Dexter encuentra pruebas de que Zach mató Cassie. Él sigue Zach a un hotel en Key West, y Hannah le acompaña. Durante el viaje, Dexter tiene previsto llevar Hannah una nueva identidad para que pueda huir del país. Debra utiliza un GPS de Elway para seguir a Dexter.

Tras despertar ileso, Dexter se da cuenta de Hannah les ha enviado un mensaje. Dexter encuentra el alias y la dirección actual de Hannah, y se entera de que está casada con el multimillonario Miles Castner. Masuka descubre que Nikki trabaja en un bar de topless e intenta conseguirle trabajo en su laboratorio. Zach visita la comisaría con su abogado y le exige que Quinn deje de investigarlo. Quinn y Jamie deciden irse a vivir juntos.