Tras lo ocurrido con Tuco y con Hank, Walt trata de cubrir sus huellas deshaciéndose del arma y haciéndose el desorientado apareciendo desnudo en un supermercado para no tener que dar explicaciones sobre donde ha estado al decir que no recuerda nada de los dos días que lleva desaparecido. Aunque su mujer se siente aliviada por su aparición, Marie ve lo ocurrido desde otro ángulo y encuentra rara la historia que llevó a su cuñado a estar desnudo en un supermercado. Mientras Hank se recupera de su tiroteo con Tuco y ya aliviado por la aparición de Walt trata de seguirle el rastro a Jesse tras encontrar su coche en manos de Tuco. Jesse acude a Badger para que le ayude a deshacerse de todo lo que les pueda relacionar con las drogas aunque la DEA sigue una pista que podría llegar directamente hasta ellos.

Jesse y Walt quedan discretamente en un supermercado de gasolinera para hablar ya que Walt desea dejar que se calmen las cosas antes de volver a la fabricación de la droga. Está decidido a esperar un tiempo tras el calvario que le ha hecho pasar a su familia y además en esos momentos si sale sólo más de veinte minutos su mujer comienza a preocuparse. El problema de Jesse es que Hank se ha llevado su dinero y Walt no puede darle más de 600 euros y ha de comenzar a luchar para reconstruir su vida.

Mientras Walt ha de pagar la extensa factura de su tratamiento e ingreso, su recién ascendido cuñado Hank sufre las consecuencias de su encuentro con Tuco y el primer indicio le ocurre en el ascensor del trabajo ya que empieza a marearse y a perder la compostura. Jesse recupera la caravana con el dinero que le ha dado Walt, además de un coche y alquila una casa a una joven que vive en la casa de al lado. Como no quieren tratar con otro Tuco y Jesse está muy perseguido por la DEA llega a la conclusión de que pueden manejar la producción y la distribución contratando a conocidos para distribuir su producto en las calles. Walt acepta porque tras pagar la primera fase del tratamiento y su costosa coartada se ha quedado sin dinero.

Una vez firmados los papeles del divorcio, Walt empieza a trabajar para Gus, conociendo a su nuevo ayudante, un tipo realmente preparado. Mientras, Jesse quiere montar el negocio por su cuenta contando con sus viejos amigos. Lo que no sabe es que tiene a Hank pisándole los talones.