Corday y Romano discrepan entre sí respecto a un diagnóstico para un paciente. Carter inspira a una estudiante de segundo año, para solicitar un puesto en urgencias

¿Cómo de lejos está muy lejos? Ross de manera no autorizada decide ayudar al bebé enganchado a la heroína y cuando le dan el alta alega que tiene neumonía para así poder tratarle

Lucy diagnostica un cáncer en estado avanzado a una mujer china. Su familia se niega a decirle la verdad porque considera que si lo sabe perderá la voluntad de vivir. Carter atropella con la ambulancia que conducía a un joven, mientras prestaba un servicio médico. Carol comprueba que está embarazada, pero por el momento no tiene intención de decirle nada a Doug, que está ausente.

Lucy vuelve a la rotación de urgencias y Carter es nuevamente su supervisor. Un corte en el fluido eléctrico altera el funcionamiento del hospital e incluso la decisión de Carol de mandar un fax a Doug comunicandole su embarazo.

Romano presiona de todas las formas a su alcance para impedir que Peter y Elizabeth consigan la plaza de traumatología en urgencias, les quiere en cirugía. Por fin Carol cuenta a Doug lo de su embarazo. Llegan a Urgencias tres jovenes víctimas de un accidente, uno de ello con un 80% de quemaduras.

Tras el funeral de su madre, Greene decide pasar unos días en San Diego con su padre. Cuado regresa, atiende a una joven con cáncer de piel, que tras firmar la petición de no reanimación, decide querer vivir. Mientras, la amante de Carter, Elaine, es atendida por Corday ya que tiene cáncer de mama. Jeanie, afectada por la muerte de la madre del pequeño Ortega, decide intentar adoptarle.

La relación entre Abby y su madre empeora. Al no tomar la medicación, provoca un altercado en una tienda por lo que Abby decide llevarla al hospital para hacerle pruebas pero se escapa. Mientras Corday se somete a un interrogatorio debido a la denuncia que le han puesto. Miente sin querer, a pesar de estar bajo juramento, pero lo peor le viene cuando Greene le dice lo de su tumor.

Una serie de acontecimientos en orden cronológico invertido llevan directamente a la Navidad. La atormentada vida de Kovac se vuelve trágica tras el accidente de coche en una carretera helada y su acompañante, la joven estudiante de medicina Erin Harkins es seriamente herida. Anteriormente Kovac se esfuerza para ayudar a un hombre joven Rick a luchar por su vida al sufrir una recaída inesperada. Por otra parte, Abby y el personal de urgencias atienden a una beligerante pareja de “elfos” y a una joven jugadora de hockey, Jane, con una herida en la cabeza.

Weaver se enfrenta a un dilema cuando un influyente concejal John Bright, acude a urgencias por una caída y da positivo en la prueba de sífilis, información que sería muy perjudicial si se hiciese pública. Mientras tanto, Carter queda impresionado por un irascible y viejo médico, McNulty, supervisor de una clínica médica en una zona pobre de la ciudad. Por su parte, Kovac desafía la ética convencional engañando a un hombre gravemente herido para que abandone a su agonizante mujer diciéndole que ya ha fallecido. Pratt decide autorizar a un drogodependiente a permanecer junto a su madre en estado terminal, mientras desconfía del nuevo trabajo de su hermano Leon. Finalmente, Weaver y Kovac difieren sobre qué hacer con un chico joven cuyo historial médico sugiere repetidos abusos durante su infancia.

Debido a que la sala de urgencias está siendo reformada y a la colisión de numerosos vehículos justo en el parking de ambulancias, el caos es mayor que de costumbre. La vuelta de Carter de África pasa casi desapercibida, al igual que la incorporación de Neela Rasgotra, una joven radiante que ahora estudia y trabaja en el County General. Pratt, que está saliendo con Chen, provoca enseguida roces entre ambas mujeres debido a su ligoteo con Neela. Todavía en proceso de familiarización con el hospital, Neela se hunde al no haber monitorizado con la suficiente atención a un anciano y muere. Sin embargo, los amplios conocimientos de Neela sobre biología molecular le permiten contradecir a una sala llena de médicos y salvar la vida de una madre herida en un accidente de tráfico. Mientras tanto, Lewis sigue saliendo con el chico con quién se casó por impulso en Las Vegas y del que después se divorció. Romano se siente impotente en su nuevo papel no quirúrgico. Y Abby rechaza el débil intento de Carter de disculparse por haberse marchado tan de repente para ejercer como voluntario en el Congo con Kovac. Justo cuando parece que la pareja se ha reconciliado, llegan noticias alarmantes desde África que obligan a Carter a regresar al continente africano.

Para sorpresa de todos, Lewis organiza en su casa una cena con su paciente Ben Hollander, un anciano deprimido que está a punto de quedarse ciego. Además, Lewis atiende a un ama de casa estresada, prepara una reunión con Hacienda para una inspección y encuentra incluso tiempo para esconder el brazo ortopédico de Romano. Entretanto, Neela y Pratt atienden a un vulnerable joven de 18 años que ha sufrido una agresión en la cárcel, y Gallant se la juega en un arriesgado traslado al hospital de un joven paciente con cáncer séptico. Kovac se enfrenta con Corday por el tratamiento de un paciente que Corday cree que tiene una apendicetomía. Además, Sam, la nueva enfermera, deja a su precoz hijo Alex en la sala de urgencias durante un día entero, y allí el niño asiste a una clase magistral de medicina.

Kovac ayuda a una motorista inmovilizada y a su hijo. Mientras los está atendiendo el niño es golpeado por un coche, y resulta gravemente herido. El médico se esfuerza por mantenerlo vivo hasta que pueda ser traslado al hospital. Por su parte Abby –que espera ansiosa sus notas- debe atender a Richard Gould, un cascarrabias que se siente olvidado a pesar de haber dado clases a cientos de estudiantes. Neela se marcha pensativa a la Universidad de Michigan para comenzar su internado; Weaver espera ganar la custodia de su hijo.