Alex se arrepiente de lo que ha hecho, especialmente después de recibir una llamada de Paige en el trabajo y reconciliarse más tarde. Alex está feliz de haber traído mucho dinero a casa, pero no quiere que Paige descubra que está haciendo striptease. Todos los planes van bien hasta que Paige aparece en el trabajo con flores, lo que provoca una inevitable ruptura. En el trabajo, Alex se da cuenta de que no está destinada a renunciar a su alma y renuncia. Desafortunadamente, en casa las cosas no son mejores cuando descubre que su madre ha utilizado el dinero que le dio para liberar al estúpido novio de la cárcel. Alex abandona su hogar y se reúne con Paige en el baile. El mundo de Sean se pone patas arriba al pensar en qué hacer si Emma está embarazada y decide que Emma debería tener al bebé, pero él seguirá yendo al ejército. Esto no agrada en absoluto a Emma y más tarde descubrimos que no está embarazada. En este punto, Emma y Sean simplemente van a intentar disfrutar del tiempo que les queda.