John Porter lidera a su unidad en la batalla tratando de rescatar al CEO de una compañía británica de fabricación de armas capturado en Irak, justo antes de que comenzara la invasión. Su equipo es unido por Hugh Collinson, un operativo de inteligencia militar británica. La operación casi sale mal cuando Collinson mata a la mayor parte del equipo de Porter y culpa a un adolescente suicida, As'ad, a quien Porter había salvado anteriormente. Los miembros sobrevivientes del equipo logran rescatar a su objetivo, y Porter rechaza la oferta de Collinson de unirse a la Sección 20, una nueva unidad dentro de la inteligencia militar, dudando del relato de Collinson sobre el incidente de la operación de rescate y renuncia al SAS.

Un francotirador intenta matar al Presidente de Zimbabue. Dado que hay evidencia de que el francotirador podría ser británico, Porter es enviado de incógnito para localizar al francotirador y silenciarlo.

Collinson viaja a Sudáfrica para enfrentarse al contacto que traicionó a la sección 20, pero descubre que puede ser demasiado tarde; mientras el coronel Tshuma inicia una persecución para encontrar a Porter y Masuku.