La película comienza con una secuencia introductoria que involucra a los personajes principales e imágenes del espacio. Estas imágenes prácticamente estáticas revelan los elementos clave de la película: Justine, la novia, sumida en una profunda melancolía con pájaros cayendo detrás de ella; un jardín con árboles y un reloj de sol con dos sombras distintas; la pintura "Los cazadores en la nieve" de Pieter Brueghel el Viejo ardiendo; el caballo negro derrumbándose en cámara lenta; Justine como una novia siendo arrastrada por un río; su vestido de novia enredado en plantas; y finalmente, Justine y su sobrino construyendo su cueva mágica antes de que Melancolía se estrelle contra la Tierra.