En Navidad de 2008, se encontró el cuerpo de Annabel Tilson, empleada del Ministerio de Relaciones Exteriores, en un lago congelado. Se asume que se suicidó después de sufrir un aborto espontáneo y una degradación laboral cuando le robaron su computadora portátil, que contenía información confidencial. Ahora su hermana gemela, Minnie, ha encontrado un video que muestra que Annabel se encontró con alguien antes de su muerte y probablemente fue asesinada. Sandra descubre que Annabel fue deliberadamente utilizada como chivo expiatorio para apartarla del camino al descubrir que su jefe casado tenía una aventura con un colega. También se tropezó con información privilegiada en el comercio, pero resulta que la clave de su muerte está en su vida personal, más que profesional.