Después de haber vivido dos años en aislamiento desde la muerte de su hija, el psíquico Dr. John Clancy es solicitado por su amigo Joe Merriweather, un agente especial del FBI, para ayudar a resolver varios asesinatos cometidos por un asesino en serie. La Dra. Katherine Cowles, socia de Merriweather en el FBI, es escéptica acerca del don de Clancy, pero pronto descubre lo contrario. Resulta que todas las víctimas sufrían enfermedades terminales y Clancy se da cuenta de que el asesino tiene habilidades que superan las suyas. Merriweather es disparado por el sospechoso y mientras está en el hospital, admite que le diagnosticaron cáncer terminal. Después del funeral, Clancy se enfrenta al asesino, quien explica que está salvando a sus víctimas de una muerte lenta, matándolas por misericordia, y que él planeó la muerte de Merriweather. Arrogantemente declara que ha visto todas las posibilidades, pero Clancy lo sorprende haciendo algo que no había predicho, aunque Ambrose logra escapar.