La serie trata sobre la vida de todos los días de Jerry Seinfeld y sus tres amigos, Cosmo Kramer (Michael Richards), George Costanza (Jason Alexander) y Elaine Benes (Julia Louis-Dreyfus), quienes interactúan en el apartamento de Jerry y sus alrededores en Manhattan, Nueva York.

Un eminente Psiquiatra de Boston, Frasier Crane, vuelve a su ciudad natal Seattle, dejando atrás su antigua vida, tras un divorcio y a sus amigos del Bar Cheers. En Seattle trabaja como Psiquiatra de éxito en una cadena de radio, junto a su compañera Roz Doyle, y comparte piso con su padre Martibn Crane, un policía retirado y su perro Eddie. Como mejor amigo tiene a su estirado, hilarante e hipocondríaco hermano Niles Crane, con el que vivirá situaciones muy cómicas. Completan el reparto Daphne Moon como cuidadora y fisioterapeuta de Martin y la la auxiliar de enfermería que ayuda a Martin, y la ausente esposa de Niles siempre presente en los dialogos pero que nunca aparece en al serie. Una excelente comedia, que no debe perderse.

Telecomedia que gira en torno a un disparatado juzgado de guardia nocturno de Manhattan, presidido por el joven y excéntrico juez Harold T. "Harry" Stone (Harry Anderson). Harry siempre está de buen humor, le gustan las bromas y los trucos, y aunque para ser magistrado sólo tiene 33 años, a veces parece que tiene 12. Otros personajes son el engreído y vanidoso fiscal Dan Fielding (John Larroquette), siempre detrás de las mujeres bellas, y Bull Shannon (Richard Moll), un alguacil de cabeza rapada, de enorme estatura y pocas luces. En el juzgado de guardia todas las noches se ven los más inverosímiles casos y, aunque los desarrollos de los juicios son de lo más imprevisibles, al final Harry siempre intenta imponer un verdedicto justo... no sin antes divertirse un poco.

Bob Newhart interpreta a Bob McKay, un artista de tarjetas de felicitación, cuyo cómic de los años 50, Mad Dog, fue relegado al olvido cuando un subcomité del Senado determinó que su cómic corrompía a su joven audiencia. Sin embargo, años después, la Compañía de Comunicaciones Transcontinentales Americano-Canadiense, también conocida como AmCanTranConComCo, compra los derechos de la serie y quiere un regreso. Sin embargo, surgen conflictos cuando el director Howard Stone quiere reinventarlo y convertir a Mad Dog en un vigilante.