Josh y Santos visitan New Hampshire para lanzar la campaña presidencial. Josh tiene experiencia en dirigir campañas nacionales y tiene una idea clara sobre lo que los candidatos deben y no deben hacer para ser elegidos, pero el enfoque de Santos difiere drásticamente: él cree en hablar sobre grandes ideas en lugar de decir lo que sea necesario para ganar votos. Esta diferencia de opinión, combinada con la sabiduría convencional que dice que Santos no tiene ninguna posibilidad de ganar, amenaza con hundir la campaña antes de que haya comenzado. Will y Donna también están en New Hampshire, dirigiendo la campaña del Vicepresidente Bob Russell, lo cual pone sus intereses en conflicto con los de la campaña de Santos.

Cinco días antes de las primarias demócratas de New Hampshire, la campaña de Santos corre el riesgo de extinguirse ya que a Matt no lo han invitado al último debate. Josh propone varias estrategias para lograr que Santos participe en el debate, incluyendo acuerdos, desafíos legales, anuncios de ataque y trucos publicitarios, pero el congresista se muestra renuente a participar. Con Josh luchando por mantener viva la campaña, Santos pide ayuda desde Washington para afinar su mensaje. Hoynes y Russell lanzan anuncios de ataque sobre los registros de cada uno, y Josh se da cuenta de que se necesita una última opción desesperada para mantener a Santos en la carrera.