Rollins es arrestado y brutalizado por la policía cuando lo ven corriendo en un vecindario blanco, lo que rápidamente se convierte en una compleja situación política que involucra al fiscal Bruce Rogoff y al LAPD. Luego, Mullaney va a Zoey para ayudar a encontrar cualquier evidencia de un soborno relacionado con la golpiza de Rollins. Mientras tanto, C.J. viaja a Arizona a un tribunal navajo para representar a una mujer que demanda a su ex esposo navajo por secuestrar a su hijo medio caucásico para buscar un fallo que le permita criar a su hijo en su reserva. De vuelta en Los Ángeles, Becker desahoga su frustración por su divorcio con una pareja recién casada que solicita un acuerdo prenupcial, lo que llama la atención de Gwen después de que es contratada como nueva secretaria de Becker. Además, Brackman se frustra por las historias sensacionalistas sobre él después de que Vanna White lo deja.

Kuzak contraataca al despacho con venganza al tratar de despojarlo de todos sus activos financieros y también al intentar persuadir a Grace, Victor, Abby y Rollins para que se unan a él y formen su propio despacho de abogados, lo que lleva a McKenzie y Brackman a presentar una demanda en su contra. Pero Kuzak responde presentando una demanda contra el despacho para que sea puesto en administración judicial. Mullaney defiende a una pareja científica cristiana acusada de homicidio involuntario en la muerte de su hijo. Jack Sollers es contratado por McKenzie y Brackman como su nuevo litigante principal por un periodo de dos meses. Mientras tanto, C.J. viaja con Zoey a Palm Springs para ayudar a enseñar una clase de derecho a un grupo de abogados extranjeros de una manera poco convencional.

Desde la partida de Michael Kuzak, Victor Sifuentes, Abby Perkins y Jack Sollers de la firma, McKenzie y Brackman están buscando más poder litigante. Grace, quien ha sufrido un aborto espontáneo y ha dejado a Victor, regresa a la firma y de inmediato se le asigna un caso de alto perfil junto a Mullaney para defender a Elsa Chandler, una mujer acusada de asesinar a su esposo abusivo. McKenzie intenta adaptarse al nuevo inquilino audaz que comparte espacio de oficina, la abogada de entretenimiento grosera, de lengua afilada y fumadora empedernida, Susan Bloom, para impulsar los ingresos de la firma en declive. Mientras tanto, la secretaria de Becker, Gwen Taylor, está en el jurado y es testigo de cómo el asociado de Bloom, el astuto Frank Kittredge, va más allá de los límites éticos para defender a su adinerado cliente de un cargo de agresión. Kelsey y Markowitz luchan por encontrar la niñera adecuada para su hijo, Matthew, y contratan a Ned Barron, un estudiante universitario perfecto para el trabajo. Además, Billy Castroverti es contratado como nuevo asociado junior.