Gavin se mete en una discusión por una hamburguesa con una mujer corpulenta que lleva consigo a un joven esposo indio. Madge se sorprende al ver que es Valma, una de sus hijas distanciadas, que ha venido a Benidorm por casualidad. Valma es una adinerada propietaria de viviendas, pero a pesar de los esfuerzos de Janice por lograr una reconciliación, Madge está convencida de que ella los ha seguido para obtener el dinero de Mel. Alguien que también está tras el dinero de Mel es Gary, un estafador que se hace pasar por promotor inmobiliario. Su cómplice es Brandy, quien también es su novia, y estafan a los turistas usando la llave maestra que Brandy robó a Mateo para acceder a sus habitaciones. Mientras Madge, drogada por pastillas de éxtasis que confundió con medicamentos, está interpretando "Up, Up and Away" en la noche de karaoke, los dos criminales escapan.