La historia real de la incansable búsqueda de justicia de Mamie Till Mobley para su hijo de 14 años, Emmett Till, quien, en 1955, fue linchado mientras visitaba a sus primos en Mississippi.

Las aventuras continúan en el fantástico mundo del juego Jumanji, donde nada es lo que parece. En esta ocasión, los jugadores vuelven al juego, pero sus personajes se han intercambiado entre sí, lo que ofrece un curioso plantel: los mismos héroes con distinta apariencia. Pero, ¿dónde está el resto de la gente?

Nichols, un detective endurecido de Nueva Inglaterra que no se inmuta en su búsqueda de un caso donde nada es lo que parece, uno que comienza a desmantelar las ilusiones en su propia vida.

Durante la infancia y la adolescencia, Mitch (Ryan Reynolds) y Dave (Jason Bateman) fueron amigos inseparables, pero con el paso de los años se han ido distanciando. Dave es un abogado enganchado al trabajo, se ha casado y tiene tres hijos. Mitch sigue soltero, es bastante inmaduro, trabaja a veces y vive sin ataduras de ningún tipo. Mitch cree que Dave lo tiene todo: una preciosa esposa (Leslie Mann), unos niños que lo adoran y un buen trabajo en un prestigioso bufete. Dave, por su parte, envidia a Mitch porque vive sin estrés ni presión ni obligaciones. Un día, después de compartir una gran borrachera, los mundos de Mitch y Dave se vuelven del revés: cuando se despiertan cada uno ocupa el cuerpo del otro, de modo que no tendrán más remedio que intercambiar sus papeles.

La suerte no sonríe a las antiguas Bellas de Barden. Tras ganar el Campeonato Mundial y separarse, sus vidas no están siendo lo que soñaban. Ahora, su mayor deseo es reunirse de nuevo y volver a cantar en los escenarios.

Tras la muerte de Jeanine, Evelyn maneja la ciudad con puño de hierro, los muros siguen cerrados y los miembros de Erudición que trabajaban con la antigua líder están siendo ejecutados. Mientras, Tris y Cuatro planean acceder al mundo exterior.