Resumen: Año 1865. Un soldado de la Unión entra en una iglesia católica a confesar sus 'malos' actos incalificables cometidos durante la Guerra Civil. 'Háblame de Meridian', le pide el sacerdote antes de dispararle. El sacerdote es en realidad Cullen Bohannon, un antiguo soldado. En un salón de lujo, Thomas 'Doc' Durant explica el proyecto del ferrocarril Union Pacific a acaudalados inversores, provocando los aplausos cuando lo compara con las pirámides de Egipto y el Gran Muralla de China. En un tren en dirección al oeste, Cullen conoce a dos hermanos irlandeses inmigrantes, Mickey y McGinnes Sean, que están leyendo lo ocurrido con la muerte en la iglesia católica. Los tres hablan sobre sus creencias religiosas y, además, coinciden en buscar trabajo en la construcción del ferrocarril. En Iowa, Daniel Johnson, el capataz del ferrocarril, contrata a Cullen para supervisar a los trabajadores negros que forman la cuadrilla encargada de preparar el terreno para la construcción del ferrocarril. Johnson trata a los libertos como un antiguo maestro de esclavos y Cullen lo comprobará a través de sus sucios trucos. 'Algunas cosas no cambian nunca', murmura Elam Ferguson, uno de los libertos de la cuadrilla. Por otro lado, el reverendo Nathaniel Cole bautiza a Joseph Black Moon, indígena cheyenne, en el río Missouri. Más tarde, los dos llegan al campamento itinerante que acompaña a la expansión occidental de los ferrocarriles. Cole señala a las prostitutas y borrachos reunidos y le dice a Joseph que levantarán la carpa iglesia al lado de ellos. 'Nosotros hacemos nuestra propia conversión aquí', les advierte una prostituta.

La búsqueda de Cullen por el sargento es desviado por un obstáculo inesperado. Durant organiza un grupo de búsqueda para recuperar a la desaparecida Lily Bell.

Durant y Lily viajan a Chicago, él, para seguir discutiendo sobre el ferrocarril con el Senador Crane, ella, para reunirse con la familia de su difunto marido. Los irlandeses de Hell On Wheels se preparan para colgar a Elam. Cullen interfiere y le ayuda a escapar.

El plazo del ferrocarril que se avecina pone a Cullen y Lily juntos. Joseph y Elam hacen frente a lo que su misión violenta ha causado.

Bohannon se ha unido a una banda de asaltadores de trenes. Paralelamente, harto de que les roben los sueldos de sus trabajadores, Durant contrata a Elam para que proteja el dinero en sus trenes. Mientras tanto, cuando una prostituta aparece muerta en el burdel, Sean ofrece sus servicios como vigilante.

La antigua banda de Bohannon llega al emplazamiento de la construcción con la intención de robar las nóminas de los trabajadores del ferrocarril. Con casi todos los hombres construyendo el puente, Durant apenas tiene gente para defender la caja fuerte.

En ausencia de Durant, Lily pide al sueco que le eche una mano con los libros de cuentas, pero Cullen no está dispuesto a permitirlo y menos sospechando que está detrás del ataque indio al tren. Mientras tanto, Elam ofrece su ayuda a los hermanos McGinnes para hacerse con el bar de Carl.

Lily llega a un acuerdo con Elam para que le ayude a entregar a Durant a cambio de un buen puesto en el ferrocarril cuando ella sea la jefa. Mientras, el sueco aparece moribundo en el pueblo anunciando el ataque inminente de los indios.