En la Nueva York de 1958, Midge Maisel vive feliz con su marido, sus hijos y sus cenas de Yom Kipur en su piso del Upper West Side. Pero cuando su vida da un giro inesperado, debe decidir rápidamente qué se le da bien, y pasar de ama de casa a humorista es un disparate para todos menos para ella. La maravillosa Sra. Maisel está escrita y dirigida por Amy-Sherman-Palladino (Las chicas Gilmore).

Chuck Rhoades (Paul Giamatti), un influyente y acomodado fiscal de Nueva York, investiga un caso de uso de información privilegiada vinculado al multimillonario Bobby "Axe" Axelrod (Damian Lewis). Axe dirige su propia compañía habiendo empezado de cero, sobrevivió a los ataques del 11 de septiembre y al colapso financiero de 2008, y ahora es el rey de los 'hedge funds' (fondos de inversión privados). Es atractivo, goza de gran prestigio, tiene en el bolsillo a la opinión pública y nadie se atreve a llevarle la contraria. Rhoades, creyente férreo en la justicia pero ambicioso, vislumbra este caso como la oportunidad que siempre ha esperado para hacer despegar su carrera. Pero descubre que Axe es un hueso duro de roer. Un problema añadido es que Wendy (Maggie Siff), su mujer, ocupa un puesto crucial como 'coach' y psicóloga en la empresa de Axe. Pronto ambos hombres se ven enzarzados en una encarnizada lucha de titanes en la que no dudarán en recurrir a sus mejores bazas -incluso al juego sucio- para vencer al otro a cualquier coste.

Brooke, una ex bailarina profesional, y Cary, su hermano aspirante a actor, intentan encontrar su lugar en el mundo mientras luchan con sus sentimientos sobre el repentino ascenso a la fama de su hermano Chase de 13 años.

Desde pequeño, Payton ha tenido clarísimo que va a ser presidente. Pero primero deberá sobrevivir al entorno político más traicionero de todos: el instituto.

La variedad de humillaciones, desastres y triunfos raros de cuatro chicas muy diferentes: Hannah, una aspirante a escritora; Marnie, una asistente de galería de arte y primos Jessa y Shoshanna.