El sheriff Ray Owens es un hombre que se ha resignado a una vida de lucha contra el pequeño crimen que tiene lugar en la tranquila ciudad fronteriza de Somerton, Arizona, Arizona. Dejó su puesto en el Departamento de Policía de Los Ángeles luego de una operación fallida y lo dejó atormentado por el fracaso y la derrota después de que su compañero quedó lisiado y su equipo diezmado. Los crímenes experimentados en Sommerton van desde el alcalde estacionando su Camaro en el carril de incendios hasta el recolector de armas antiguas Lewis Dinkum disparando armas a trozos de carne con los agentes.