La jefa de Urgencias, la doctora Weaver se precipita al ayudar a su compañera, la bombera Sandy López, que resulta gravemente herida mientras trabajaba. Asustada por el estado de gravedad de Sandy, Weaver la da esperanzas recordándola que es madre de un niño recién nacido. Por otra parte, la doctora Sussan Lewis que se encuentra en estado de gestación, realiza un gran esfuerzo y debe guardar reposo durante el resto del embarazo. Mientras que la tensión entre Gallant y Neela aumenta a causa de la investigación de un paciente que ha fallecido y Corday recibe una gran sorpresa. Neela y Abby conocen las notas de sus exámenes de medicina, y Chen y Pratt tratan a un hombre mayor, cuya familia no quiere hacerse cargo de él.

Kovac ayuda a una motorista inmovilizada y a su hijo. Mientras los está atendiendo el niño es golpeado por un coche, y resulta gravemente herido. El médico se esfuerza por mantenerlo vivo hasta que pueda ser traslado al hospital. Por su parte Abby –que espera ansiosa sus notas- debe atender a Richard Gould, un cascarrabias que se siente olvidado a pesar de haber dado clases a cientos de estudiantes. Neela se marcha pensativa a la Universidad de Michigan para comenzar su internado; Weaver espera ganar la custodia de su hijo.

El doctor Gregory Pratt, la psiquiatra Jing-Mei y un joven pasajero sufren un grave accidente en coche cuando un individuo les dispara y el doctor Pratt pierde el control del vehículo cayendo al rio Chicago. El rescate es muy dramático y los accidentados tienen graves heridas. Sam tratando de dar una mejor vida a su hijo se ha marchado de la ciudad y Luca, trata de encontrarla abandonando el servicio de urgencias. Weaver ante la entrada inusitada de urgencias obliga a Abby a tomar posesión de su nuevo destino como doctora.