Allison sigue teniendo el mismo sueño, o tal vez sea un día, y las pistas que recibe podrían ayudarla a prevenir una tragedia.

Allison y Devalos ven las puertas para hacer justicia. Y es que el senador Jed Garrity en plena campaña electoral propone a Devalos como fiscal del distrito. Si ganara, éste podría recuperar su puesto, pero para ello necesita también el apoyo de Allison que deberá enfrentarse de nuevo a la opinión pública. Esta podría ser la forma de que ambos recuperaran la confianza. Pero pronto Allison descubrirá que el senador está envuelto en una terrible conspiración. Con la ayuda de Lee y Devalos llegarán hasta el final del oscuro secreto. Por otra parte, Joe tendrá que lidiar otra batalla en casa cuando Bridget se empeña en localizar a un teleoperador para prevenirle de un posible robo en su casa.