Carrie es secretamente cortejada por un hombre casado y decide probar con él. Sin embargo, pronto descubre que, en realidad, lo que busca es casarse. Él compra una nueva casa y celebra una fiesta de inaguración. Le pide a Carrie que invite a sus amigas, así que Charlotte y Samantha acuden para conocer hombres. Pero resulta que todos los invitados son parejas casadas. Samantha bebe demasiado y Charlotte la deja quedarse a dormir en su casa. En mitad de la noche, Samantha, todavía borracha, baja y le dice al portero que suba al apartamento para hacer el amor. Miranda, creyendo que es lesbiana, se relaciona con otra mujer. Decide dejar que sus compañeros de trabajo lo piensen porque cree que ayudará a su carrera, pero después se da cuenta de que no puede mantener el engaño. Carrie decide que su hombre no se ajusta a sus requerimientos, así que lo abandona, dejando que se relacione con Charlotte, que también lo deja.