Brandon Sullivan es un ejecutivo de la ciudad de Nueva York y soltero a largo plazo. Es adicto al sexo y frecuentemente tiene relaciones sexuales con prostitutas y se masturba varias veces al día, a veces viendo pornografía en sus computadoras de trabajo. Un día, Brandon hace contacto visual con una mujer que lleva un anillo de compromiso en el metro durante su viaje matutino. Al principio, ella corresponde, pero luego se siente incómoda. Cuando salen, ella desaparece entre la multitud. Luego, se masturba en el baño de su trabajo. Brandon y su jefe casado, David, coquetean con mujeres en un club; más tarde, Brandon tiene relaciones sexuales en una calle tranquila con Elizabeth, la mujer que David estaba persiguiendo.

Mientras investiga un caso extraño, un oficial de policía de la ciudad de Nueva York conoce a un sacerdote que lo convence de que el incidente está relacionado con la posesión demoníaca.