Narrada desde la perspectiva de un documental, la serie ofrece un panorama honesto y divertido sobre la vida de varias familias, en donde se presentan la relación entre padres e hijos, diferencias generacionales y culturales.

Frank Gallagher de Chicago es el orgulloso padre soltero de seis hijos inteligentes, trabajadores e independientes. Cuando Frank no está en el bar gastando el poco dinero que tienen, se desmaya en el suelo. Pero los niños han encontrado formas de crecer a pesar de él. Puede que no sean como cualquier familia que conozcas, pero no se disculpan por ser exactamente quienes son.

Un delincuente siempre deja huellas. Es lo que muestra la serie C.S.I. (Crime Scene Investigation). Producida por Jerry Bruckheimer, el director de las películas Armageddon y The Rock, y coproducida por James C. Hart, dos veces nominado al premio Emmy por las series Chicago Hope y Wonder Years. C.S.I. retrata el difícil día a día de un grupo de investigadores judiciales de la ciudad de Las Vegas, en la que resuelve casos en que la policía falló y analiza los lugares donde se hicieron crímenes. Una hebra de cabello, un pedazo de uña, huellas dactilares. Todas estas pistas improbables son herramientas para llegar al delincuente. Un aparente suicidio puede revelarse un asesinato cruel, sólo a través del análisis del tamaño del agujero de la bala en el cuerpo. Entrenados en los tradicionales métodos de investigación, los especialistas de la serie buscan todas las evidencias en el lugar del crimen. La experiencia y el instinto también son armas poderosas en el combate a la violencia. Sus conclusiones siempre son sorprendentes. La razón del crimen y la identidad del culpable no siempre son fáciles de descubrir.

Tori Vega es una adolescente de 16 años de edad que inesperadamente entra en el instituto Hollywood Arts después de que su hermana Trina tiene un percance médico en la noche del espectáculo de talento anual de la escuela, Tori tiene que remplazarla en su actuación acompañada de su talentoso amigo André y de su banda. Hacen que aquella actuación impresione al director de la escuela y éste le ofrece la oportunidad de su vida: una invitación a estudiar en el Instituto Hollywood Arts. Desde su primer día en la escuela, Tori se siente fuera de lugar entre los alumnos de la academia, sobre todo por la desinteresada estudiante Jade con quien no se lleva muy bien. Con la ayuda de Trina, André y sus nuevos amigos; Beck, Cat, Jade (con la que establece un amistad después del capítulo cinco) y Robbie, finalmente Tori se da cuenta de que nació para el espectáculo y que dar entretenimiento a la gente no sólo la puede hacer feliz, si no que puede cambiar su vida.