Gerry tiene un enfrentamiento con David Fleeting, a quien prácticamente acusa de ser un pervertido antes de darse cuenta de que el hombre está buscando desesperadamente a su esposa. La única complicación es que se supone que ella murió hace 18 meses. Fleeting insiste en que la vio recientemente en una multitud y ahora está convencido de que el cuerpo de la víctima de un accidente automovilístico identificado por su cuñada -él estaba de viaje de negocios en el momento del accidente- era el de otra persona. Sandra no está muy interesada, pero acepta buscar una exhumación. Una prueba de ADN revela que la mujer muerta es una inmigrante turca que fue reportada como desaparecida alrededor del mismo tiempo en que se suponía que la esposa de Fleeting había muerto. Como pronto descubren los investigadores, los dos casos están conectados y no todo es como parece a primera vista.

El equipo es solicitado por Dawn Abbott para reabrir un caso de hace catorce años de un incendio en el club Union, que mató al gánster Mark Johnson y a tres miembros del personal. Se creía que era un accidente, pero Mark le dijo a Dawn días antes del incendio que creía que alguien estaba tratando de matarlo. El hermano de Mark, Danny, se resiente ante cualquier insinuación de que él estuvo involucrado, pero el investigador de incendios George Mackie le dice al equipo que en ese momento pensó que el incendio era sospechoso y la viuda del pintor cuyos materiales supuestamente fueron los culpables del incendio recuerda que fue generosamente pagado poco después. En última instancia, el culpable resulta no ser una persona con rencor, sino un incendiario en serie que esperaba salir impune de la mayor cantidad de incendios posible.